
El imán que tienen las prendas blancas de un niño de 9 años
son directamente proporcionales a la histeria de su jefa.
Bastan 15 minutos de riesgo botanero,
para arruinar la foto de XV años de su hermana.
Tal vez este muchacho sea un gran doctor
y hoy ensuciará su primer bata.
Rojo y Blanco.
Ya saben que este blog es de contrastes.
Así como lo que le sucede a su autor.
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